REJUVENECIMIENTO DE MANOS: DILE ADIÓS A LAS VENAS PROMINENTES
Algunas personas suelen tener en el dorso de sus manos venas muy sobresalientes y con un aspecto quizás no muy agradable. Venas que no precisamente se tratan de várices o de algún tipo de patología en general, y que comúnmente son más notorias en pieles claras. ¿Cómo resolver este problema? A continuación te contamos.
Con el paso del tiempo o por factores genéticos, las manos y especialmente el dorso de ellas comienzan a tomar un aspecto muy envejecido con la edad, incluso en mujeres relativamente jóvenes. Las venas se hacen prominentes y se generan surcos intermetacarpianos, generando un aspecto poco estético y saludable. Las manos comienzan a verse muy flacas o “huesudas”, con venas más anchas y muy notorias.
Hay pocas zonas donde el proceso de envejecimiento sea más evidente que en las manos. El rejuvenecimiento mediante lipoinyección de manos es un procedimiento estético que consiste en inyectar grasa autóloga (extraída del propio paciente) en el dorso de las manos, proporcionando un contorno uniforme, un aspecto más joven y saludable.
Objetivos del Procedimiento
El objetivo del rejuvenecimiento mediante lipoinyección de manos es restaurar el volumen perdido, mejorar la textura y apariencia de la piel, y reducir la visibilidad de venas y tendones, logrando unas manos más juveniles y estéticamente agradables.
Recuperación
Este procedimiento es ideal para adultos que presentan signos visibles de envejecimiento en las manos, como adelgazamiento de la piel, venas y tendones prominentes. No es recomendable para personas con problemas de coagulación, usuarias de corticoides o de aspirina. Se sugiere para pacientes mayores de 40 años que buscan una solución estética a los signos del envejecimiento en las manos.
Post Operatorio:
Tras la lipoinyección, los pacientes pueden experimentar hinchazón, hematomas y sensibilidad en las manos, que suelen desaparecer en pocos días. Es importante evitar esfuerzos físicos intensos y la exposición directa al sol durante las primeras semanas. El uso de compresas frías puede ayudar a reducir la hinchazón y las molestias.